Interesante documental en el que se recogen testimonios de estudiantes y profesores GLBT. También se muestran excelentes experiencias educativas llevadas a cabo en varias escuelas de la red pública, que posibilitan una mejora de la convivencia y el respeto hacia los nuevos modelos de familia y a la diferencia por orientación sexual o identidad de género.
Por
otro lado, dos de cada cinco estudiantes presencian a menudo insultos como
“bollera”, “maricón” o “marimacho”. Así, el 46,8 % ha sido testigo de ataques
verbales y físicos a quienes creen GLBT, y casi cuatro de cada diez han
escuchado alguna vez amenazas o expresiones de odio hacia dicho colectivo.
Quienes sufren acoso no toman ninguna medida en el 33,9 % de los casos, y el 28
% intenta hacer como si no se diera cuenta. Sin embargo, un 15,53 % intenta
cambiar su conducta o preferencias, e incluso cambiar de colegio (13,44 %) o de
clase (10,53 %). El 5 % de las víctimas de acoso escolar ha intentado quitarse
la vida, cifra que aumenta hasta el 13 % en el caso de quienes afirman no ser
heterosexuales (tres veces más que el resto de víctimas).
Buena
parte del profesorado no sabe cómo actuar
Por
lo que se refiere a los profesores, solo la mitad de los encuestados
afirma intervenir siempre ante las situaciones de homofobia (50,8 %), mientras
que uno de cada tres no sabe cómo actuar. Entre los motivos esgrimidos destaca
el no sentirse respaldados o temer la reacción del alumnado (4,71 %), equipo
directivo (5,88 %) o las familias (9,41 %). Existe un problema más: la gran
mayoría afirma no haber recibido ningún tipo de formación sobre diversidad sexual
(60,4 %). Un porcentaje menor (26 %) asegura que, aunque ha recibido algún tipo
de formación al respecto, esta no ha sido la suficiente.
Los
datos del estudio, accesibles
Ya está
disponible para quien quiera descargarlo el informe final, ya sea en su versión corta, de 12
páginas, o el estudio
completo, de 136 páginas. Os invitamos a que lo hagais llegar a
todas las personas que puedan estar interesadas.