Estudiantes del IES Duque de Rivas en una instantánea tomada durante las undécimas Jornadas sobre Cultura LGBTI, conmemorativas del 17 de mayo, celebradas la pasada semana.
ARES DALMAU - UNIVERSITAT BLANQUERNA-RAMÓN LLULL
A nivel estructural, ¿cómo es la asignatura de diversidad afectivo-sexual?
No
es una asignatura. Es un proyecto de innovación educativa encaminado
a desterrar el sexismo y la violencia del entorno escolar, con
especial atención hacia aquellos adolescentes que no se sienten
reconocidos en la orientación sexual dominante y que son
frecuentemente víctimas de la homofobia y objeto de discriminación.
Sus contenidos figuran el Proyecto Educativo del IES Duque de Rivas y
en su Programación General Anual.
La
tutoría trabaja en tres vertientes:
- Atención a adolescentes LGBTI y sus familias. Ponemos a su disposición recursos educativos que ayuden, si se precisan, a resolver las dudas que se puedan plantear sobre diversidad sexual y de género así como al empoderamiento de aquellos estudiantes que están en situación de riesgo. Mantenemos también reuniones periódicas de carácter confidencial con las personas que lo soliciten.
- Atención al profesorado. Les informamos sobre materiales educativos y cursos en DSG.
- Campañas de sensibilización escolar al conjunto del alumnado sobre los perniciosos efectos de la homofobia en la adolescencia que permitan eliminar prejuicios y desterrar los comportamientos discriminatorios. A lo largo del curso escolar organizamos charlas, talleres y conferencias que se imparten en todos los cursos de un mismo nivel formativo de acuerdo con el grado de madurez del alumnado y las necesidades detectadas. En página web del centro educativo se detallan las que hemos organizado este año.
Intentamos dar simplicidad a las actividades que organizamos. Procuramos captar la atención y empatía de los estudiantes a través de las “historias de vida”. Nuestro proyecto se nutre fundamentalmente con activistas LGBTI y profesionales del ámbito de la salud que deciden colaborar, como agentes de la educación no formal, para transmitir valores ciudadanos que promuevan la convivencia y el respeto a la diferencia por orientación sexual o identidad de género.
Una charla resultará eficaz si cumple al menos dos de las siguientes premisas:
- Que sea creíble
- Que cubra necesidades detectadas o implícitas
- Que genere expectativas de cambio o transformación personal.
3. ¿Cuál es el perfil socio-económico de los alumnos de su centro? ¿Es
un IES público o privado? ¿Hay mucha inmigración u otras
diversidades que atender? ¿Se han producido problemas o conflictos
con las familias por los contenidos impartidos? ¿Qué
opinan las familias sobre los mismos? ¿Ha
percibido alguna vez prejuicios por parte de los familiares?
Estudiantes
de perfil socio-económico medio al que se une un significado
número de alumnos procedentes de la Cañada Real, de limitada
extracción económica, pertenecientes principalmente a familias
emigrantes que están plenamente integrados en la vida de un
instituto público de referencia en la Comunidad de Madrid. Las
actividades de sensibilización educativa se desarrollan por
niveles dentro del Programa de Acción Tutorial y están
convenientemente anunciadas en la página web del centro escolar. No
ha habido problema alguno con las familias de los estudiantes. Al
contrario, en distintos momentos el AMPA nos ha prestado su
colaboración para llevarlas a cabo y en reiteradas ocasiones nos
han manifestado su compromiso con el proyecto educacional.
4.
¿Cuál
es según su experiencia la mejor edad para introducir estos temas? ¿Cree que es mejor hablar de las distintas identidades
de género, por ejemplo a los 11 (en la pubertad o un poquito
antes, cuándo probablemente aún no habrán tenido experiencias) o quizás mejor en 3º/4º de ESO, cuando los alumnos son un poco
más maduros y pueden reflexionar sobre esto de una manera más
seria o profunda?
La
Educación en Diversidad Sexual y de Género es la mejor vacuna
contra la homofobia y debería introducirse en todas las etapas del
currículo escolar, de acuerdo con el nivel de maduración de los
propios estudiantes, tal como se hace con otras disciplinas. El
prejuicio y el miedo alimentan la sinrazón. Los alumnos llegan, en
general, muy prejuiciados a la Educación Secundaria, y ya sabemos
que eliminar un prejuicio es más difícil que mover una presa de
hormigón. Esta situación evidencia, al menos en parte, que
nuestro sistema educativo no se acomoda con sus planes formativos,
en pleno Siglo XXI, a las demandas reales de un alumnado que se
desarrolla también en ambientes diversos con nuevos modelos de
familia distintos al tradicional, y que exige de la Administración
Educativa el reconocimiento de su especificidad y una especial
protección, por ser también los más vulnerables.
5. ¿Cómo
introduce el tema durante las primeras sesiones? ¿Habla primero de
valores como el respeto o la empatía? ¿Hace algún ejercicio
práctico o dinámica con sus alumnos para introducir los valores de
empatía o respeto?
Me
parece fundamental hacerles entender que todos tenemos una
corresponsabilidad con las acciones que acometemos cada día, también con las que dejamos de hacer. El respeto y la empatía son
dos valores esenciales que nos ayudan a manejarnos cívicamente. Si
queremos construir una sociedad más democrática y respetuosa con
los hechos diferenciales, se hace necesario tomar clara conciencia
de aquellas ideas limitantes - que todos tenemos - y que alimentan el
prejuicio social, causando un gran sufrimiento a personas que nada
pueden hacer por cambiar su identidad o condición sexual.
En
un tono más personal, hago referencia a las circunstancias que viví
como adolescente homosexual - en los últimos años de la dictadura
y en los primeros de la democracia - en un entorno homófobo y
hostil, y los perniciosos efectos que tuvieron sobre mi vida.
Un sentimiento de adolescencia perdida, muy común entre los jóvenes
homosexuales y transexuales de mi generación. En un tono más
constructivo, les informo de cómo a través de la resiliencia y de
la educación conseguí revertir lo que en aquellos tiempos percibía
como una tradición de condena. Y desde luego, les hablo de la gran
felicidad que me reporta HOY la Tutoría de Atención a Adolescentes LGBTI del IES Duque de Rivas. En último término, les doy las
gracias, señalando que como profesor también me he beneficiado del proyecto educativo por lo mucho
que he podido aprender en sus once años de vida.
6.¿Cuál
es la reacción de los alumnos? ¿Es fácil/difícil tratar esta
diversidad en serio y con profundidad con ellos? Y en este sentido,
¿cree que influye el marco cultural y socio-económico de los
alumnos y las familias en relacción a sus contenidos?
La
reacción del alumnado es siempre positiva. Entienden muy bien la
importancia del tema que se está tratando y agradecen, con un
mutismo inusitado, ese acto en el que de alguna manera el profesor
se inmola ante ellos para dar a conocer aspectos de su vida íntima que
entroncan directamente con los miedos e inseguridades propios de su
edad y del tiempo que les ha tocado vivir. Al término del taller se
muestran conciliadores y agradecidos. Ni
el nivel socio-económico ni el marco cultural influye en el
desarrollo de la actividad. Cuando nos atrevemos a desnudar el corazón y les
hablamos con sinceridad su respuesta es, invariablemente, entusiasta. En esta
dirección web se puede ver el extracto de una actividad
desarrollada recientemente en el Instituto de Enseñanza Secundaria
Renacimiento
de Madrid:
http://elpais.com/elpais/2016/05/17/videos/1463494694_741867.html
7. Sobre la efectividad de estas clases o contenidos: ¿Había síntomas de acoso escolar o discriminación hacia alumnos con diversidad afectivo-sexual y de identidad de género en su centro antes de poner en marcha el proyecto educativo? ¿Qué indicadores había? Y en caso positivo, ¿cree que con estas clases han bajado estos casos?
7. Sobre la efectividad de estas clases o contenidos: ¿Había síntomas de acoso escolar o discriminación hacia alumnos con diversidad afectivo-sexual y de identidad de género en su centro antes de poner en marcha el proyecto educativo? ¿Qué indicadores había? Y en caso positivo, ¿cree que con estas clases han bajado estos casos?
Sin
caer en la autocomplacencia debo decir que la Tutoría LGBTI nació
para dar respuesta a la demanda invisibilizada de adolescentes
homosexuales y transexuales, que veían un día sí y otro también
- en un espacio que proclamaba como ideario el respeto de los Derechos
Humanos - su dignidad vilipendiada cada vez que un estudiante
denigraba a otro con el consabido insulto.
La
homofobia campa a sus anchas en los centros de educación primaria y
secundaria españoles, sin que de momento las autoridades educativas
hagan nada por evitarlo.
Me
siento muy orgulloso de nuestro proyecto educacional. En el IES
Duque de Rivas hemos creado un entorno que trata de poner en valor
el respeto y la visibilización de las minorías sexuales. Once años
de trabajo continuado han dado sus frutos. No digo que de vez en
cuando no se produzcan actos homófobos; lo que sí puedo señalar,
sin temor a equivocarme, es que hoy nuestro instituto es más seguro
para aquellos estudiantes y profesores que decidimos expresar
nuestra afectividad de un modo no convencional y con entera
libertad.
8. Muchos estudios
hablan de la importancia de la visibilización del profesorado
LGTBI en las clases para dotar a los alumnos de referentes positivos
que les faltan ¿Cree que un profesor/a que no forme parte de este
colectivo puede dar las clases igual, aunque no haya vivido nunca la
discriminación e invisibilidad de la sociedad? ¿Diría que
hay una cuestión de legitimidad a la hora de enseñar o hablar de
la diversidad afectivo-sexual?
Tal como señalas, es muy importante que los adolescentes homosexuales
y transexuales cuenten con profesores LGBTI como referentes
positivos en los que mirarse. Docentes, que puedan exteriorizar con
naturalidad su condición sexual al igual que lo hacen sus
compañeros heterosexuales. Ahora bien, me parece fundamental
enriquecer el proyecto educacional con voces autorizadas muy
diversas (también de profesores y profesoras heterosexuales, padres y
madres) que aporten conocimientos y ayuden a erradicar esta lacra,
que como bien dice mi amigo Jesús Generelo, presidente de la
Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Bisexuales y Transexuales, [la
homofobia] es una de las expresiones más oscuras de la naturaleza
humana.
Como
educadores estamos obligados a mejorar la calidad de vida y cultural de
nuestros jóvenes estudiantes que les permita alcanzar el mayor grado de autonomía personal, con el horizonte puesto en la transformación de la sociedad - para hacerla más libre e igualitaria - desde el laicismo y con
los valores que propugna el movimiento feminista.